La incongruencia y el carajo

No son pocas las personas que se preguntan ¿qué le pasa al presidente López Obrador?  Y es que en los últimos meses y en especial las últimas semanas ha manifestado un notorio mal humor que raya en la ira porque, al parecer, las cosas no van muy bien que digamos a pesar de que se quiera aparentar que no pasa nada y que todo va “requetebién”.

La base del discurso que lo llevó a la presidencia sin duda fue, y es, combatir la corrupción aunado a una política de austeridad. En el tema de corrupción pues, así así no ha tenido la efectividad esperada, empezando por lo que pasó con los recursos que recibió su hermano Pío para su campaña, los contratos de Pemex a su prima Felipa y no se diga que más del 83% de los contratos del gobierno fueron asignados directamente (sin licitación pública) en el 2020 (Fuente: Compranet), por no mencionar Lozoya y el blindaje de Videgaray y Peña Nieto.

En relación a la austeridad, que ahora ya se le conoce como austericidio debido a al cierre de guarderías, refugios para mujeres, comedores comunitarios, reducción de presupuestos en mantenimiento del Metro, Semarnat, Conafor, que redujo el combate a los incendios forestales, y lo más grave: la  reducción en la adquisición de medicamentos y en especial para niños con cáncer.  De ahí la idea de ahorros mal entendidos o mal aplicados que están provocando la muerte a personas.

Por otra parte, los fallidos pronósticos y la mala actuación de su “zar anti-covid” así como sus constantes dichos de que “no pasa” nada y que ya “se ve la luz al final del túnel” sumado a su falta de empatía (capacidad de sentir e intentar ponerse en el lugar de las personas que sufren o padecen una situación de gravedad) con las pequeñas y micro empresas, fueron tan solo las primeras señales de que, este falso optimismo, más temprano que tarde, tendría que sucumbir ante la cruda e impactante realidad.

La lista de fallas, inconveniencias, imprecisiones (mentiras), contradicciones, acusaciones y las agresiones contra los medios -que lejos de cesar se han incrementado-  y varios etcéteras, sigue creciendo y atrayendo -como un ineludible karma-, más adversidades.

Para colmo, la tragedia de la caída del puente de la línea 12 del metro donde perecieron ya 26 personas que regresaban a sus casos o iban a su trabajo. No es la primera contingencia en el metro. Recientemente se incendió el Centro de Control y otras graves fallas como inundaciones, fallas de las escaleras eléctricas (más de 60% descompuestas) mientras la impasible directora del Metro, Florencia Serranía, sigue intocable e inamovible a pesar de su evidente ineptitud.

Y entre todos estos argumentos el malestar del presidente ya llega a superar lo que alguna vez arengó: “al diablo con las instituciones”, cuando a pesar de que se autodefine como un gran humanista quedó a deber cuando se negó a visitar a los heridos de la tragedia del metro diciendo que no era su estilo por lo que afirmó “¡al carajo!  y que no estaba para dar espectáculo ni tomarse la foto como harían los conservadores. Días después -el 10 de mayo-, festejaba a las madres con show en Palacio mientras afuera lo esperaba un grupo de madres que buscan ayuda y apoyo para encontrar a sus hijos desaparecidos y que nunca salió a atender ya que tenía que viajar a Tabasco  donde se le vio muy quitado de la pena paseando y dejándose fotografiar en lancha para supervisar la criticada construcción de la refinería de Dos Bocas, donde miles de trabajadores sufren retrasos y largas filas para cobrar, además de problemas de transporte, entre algunas otras situaciones  adversas. Luego en Minatitlán degustando “unos suculentos frijoles negros y una exquisita tlayuda” .

Finalmente no podemos dejar de comentar, hablando de empatía, cuando por un lado homenajeaba y reconocía al personal médico en tiempos de pandemia y por otro, les negaba el derecho a recibir las vacunas a los mismos trabajadores de la salud del sector privado.

Si todo lo anterior no es incongruencia entonces yo creo que todos, como dice el presidente, nos podemos ir ….¡al carajo!

Siga cuidándose

AF