¿Por qué defender los puentes?
Inevitable hablar de la iniciativa del Ejecutivo Federal de celebrar las fechas históricas en su día repercutiendo en la eliminación de los puentes vacacionales que ahora tenemos en el calendario oficial. Se entiende que esta idea es para no perder los valores cívicos por parte de los ciudadanos.
De acuerdo con la propuesta, se eliminarían los puentes del 5 de febrero, día de la promulgación de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos; del 16 de septiembre, día que se conmemora la Independencia, y; del 20 de noviembre, aniversario de la revolución.
Al recibir demasiadas críticas por este posicionamiento, el día 6 de febrero del presente año, en la conferencia matutina del presidente se mencionó que esta medida no afectaría al sector turístico, ya que se están realizando acciones como eliminar el sargazo en las playas o la protección de las carreteras para fomentar el turismo del país, cosa que claramente no repondría las pérdidas económicas que tendría la población por la eliminación de los puentes vacacionales, ya que esas acciones, no repercuten directamente en el bolsillo de las personas y los puentes vacacionales si lo hacen.
¿Por qué establezco lo anterior? Déjenme les explico mi posicionamiento con unos datos, de acuerdo con la Secretaría de Turismo, el primer fin de semana largo del país, es decir, del 1 al 3 de febrero, se logró una derrama económica de 4,000 millones de pesos que de manera directa o indirecta beneficiaron a las comunidades que su principal ingreso es el turismo, entre ellas nuestra ciudad y nuestro estado.
Aunado a lo anterior, de acuerdo con la Federación Mexicana de Asociaciones Turísticas (FEMATUR), en los puentes vacacionales existe un incremento de hasta 40% en el hospedaje y consumo de las zonas turísticas en comparación a un fin de semana habitual significando un gran aumento en los ingresos.
Para entender la gravedad de lo que esta medida implica, tan solo en el puente vacacional que comprende “el Buen Fin”, en 2019 se generó una derrama económica superior a los 120,000 millones de pesos. En pocas palabras, el sector del turismo representa casi el 9% del PIB creando más de 3.8 millones de empleos en el país, precisamente gracias a los puentes vacacionales.
Si la iniciativa procede, todo el sector turístico se vería afectado repercutiendo en menores ingresos y menos empleos.
Para nuestro estado esto no es de menor relevancia. Los Cabos es una de las 5 principales plazas donde se concentra la mayor parte del turismo nacional, por lo que una disminución en la afluencia de los turistas afectaría de manera directa a todos los sudcalifornianos. De acuerdo con datos oficiales de la Secretaría de Turismo, Economía y Sustentabilidad (SETUES), el sector del turismo en nuestro estado representa el 70% de nuestro PIB. Tan solo en 2019, recibimos a más de 4 millones de viajeros extranjeros y nacionales, continuando así, con un crecimiento significativo en nuestro turismo. Por ende, para nuestros municipios y nuestro estado, el turismo es el motor de desarrollo para fomentar la creación de empleos y beneficiar a nuestros productores y empresarios locales.
Si bien estoy de acuerdo con la idea de fomentar los valores cívicos entre los ciudadanos para conocer las fechas históricas de nuestro país y lo que éstas significan, creo que eliminar estos puentes vacacionales que reactivan la actividad comercial y por ende la economía de las zonas turísticas y las familias que dependen de ella, constituiría una gran equivocación que afectaría directamente a nuestro estado y nuestros municipios y, por ende, a los bolsillos y el desarrollo de nuestra población.
Fortalecer los planes educativos en el ámbito cívico sí podría ayudar en el tema.