Ballena cachalote es rescatada en la bahía de la Paz

En las inmediaciones de la bahía de La Paz, Baja California Sur, se registró el varamiento de una ballena cachalote.

Luego de un llamado ciudadano se activaron los protocolos y se iniciaron las labores de rescate del cetáceo.

Hiram Rosales Investigador Depto. pesquerías de la UABCS:"Probablemente era un cachalote joven, medía alrededor de nueve, nueve metros y medio//Estaba encallado muy cerca de la ciudad de La Paz en la zona que se conoce como la punta del Mogote".  

En las labores participaron elementos de PROFEPA, la Secretaría de Marina y la Red de atención de varamiento de mamíferos marinos de la ciudad de La Paz:

Hiram Rosales Investigador Depto. pesquerías de la UABCS:"Afortunadamente logramos sacar al animal, fue una maniobra de varias horas, estaba en aguas muy someras, se tuvo que hacer un amarre y después jalar con una embarcación menor para orientar al animal hacia aguas profundas".

Pero la tarea no fue fácil, luego de varias horas cuando se pensaba que el gigantesco ejemplar había sido rescatado, volvió a varar:

Hiram Rosales Investigador Depto. pesquerías de la UABCS: "Logramos que saliera, posteriormente se fue a meter a una de las marinas de la ciudad de La Paz que se conoce como marina Mar de Cortez, volvió a varar en esa playa, logramos de nuevo redirigirlo y al final lo conducimos por el canal de navegación y gracias al esfuerzo de todos los participantes... Se logró liberar...".

Así lograron llevarlo a aguas profundas hasta que lo perdieron de vista.

Aunque los varamientos son sucesos poco comunes, por las condiciones de la ciudad de La Paz, no son extraordinarios:

Hiram Rosales Investigador Depto. pesquerías de la UABCS: "Las características etnográficas de La Paz, la tipografía, permiten que muchas veces se detecten varamientos de mega fauna marina, no solo de mamíferos marinos, también de tortugas, incluso a veces de peces".

En 2017 se tiene registro que en la bahía de La Paz se vararon dos cachalotes machos en la misma zona.

Y en los últimos siete años se han registrado más de 300 eventos de varamientos, entre animales vivos y muertos.